Digamos que es cierto.

En una sociedad carnista y dominada por un sistema especista, es imposible abstenernos al 100% de utilizar a otros animales.

Incluso las personas que tenemos años siendo veganas todavía cometemos errores, y en cuestiones como medicina, por ejemplo, aún no podemos evitar el uso de derivados o el hecho de que todos los medicamentos fueran testados en ellos; y así como estos, otros montones de situaciones complejas que se nos plantean por no ser “normales”, porque (casi) todo lo que nos rodea está diseñado por y para gente que consume animales o bien que parece no interesarle lo que suceda con ellos.

Con respecto a este argumento, creo que la respuesta es repetida. El hecho de no poder hacerlo todo nunca debe impedir que hagamos lo mejor que podemos. Porque si todos fuéramos lo más veganas que pudiéramos, el mundo dejaría de ver a los animales como cosas mucho más rápido. Y ahí quizá podríamos hablar de un veganismo perfecto.

En este sentido, actualmente, ser 100% vegan o simplemente ser vegan; es hacer y ser lo más vegan que podamos. Termina siendo redundante, si lo evaluamos en profundidad.

Intentemos siempre seguir mejorando porque más allá del consumo directo de animales y sus productos derivados, muchas otras cosas que usamos y actividades que hacemos, también les afectan.

Por lo tanto, éste es todo un camino para recorrer y para nunca conformarnos.

Queda mucho por aprender, y por cambiar.

Avancemos lo mejor que podamos, teniendo presente que cuando la voluntad se junta con la información adecuada, las formas empiezan a manifestarse.

Texto por VeganPoint

Edición: Videos Veganos